Con la finalización del tercer plazo de registro establecido por REACH el pasado 31 de mayo, la normativa regula ya todos los productos químicos producidos o importados en la UE comprendidos entre 1 y 100 toneladas. En este contexto, y siguiendo las recomendaciones integradas en el Informe general de la Comisión de 2018 sobre REACH en el que se pide a todos los organismos implicados que mejoren aún más la aplicación de REACH, el Consejo Europeo de la Industria Química (CEFIC) y la Agencia Europea de Sustancias y Mezclas Químicas (ECHA) han firmado un acuerdo de cooperación con el fin de contribuir a este objetivo de facilitar la implementación de dicha legislación.

El acuerdo supone un compromiso de la Industria y de la ECHA para optimizar la evaluación científica de algunas sustancias o grupos de sustancias con el fin de mejorar aún más la información sobre la seguridad del producto así como su comunicación en toda la cadena de suministro.

En este sentido, Marco Mensink, Director General de Cefic, aseveró: “Acogemos con satisfacción esta cooperación ya que muestra que juntos podemos hacer que REACH funcione en beneficio de la industria y de la ECHA, así como de una amplia base de stakeholders. Por su parte, la industria ayudará a la ECHA a mejorar la calidad de los expedientes para contribuir a aplicar la ley y mejorar la calidad científica del proceso “.

Por su parte, Bjorn Hansen, Director Ejecutivo de ECHA aseguró: “Me complace firmar esta declaración conjunta que muestra el compromiso de la industria europea con REACH y el compromiso de la ECHA de trabajar con la industria. La Comisión nos ha pedido en su reciente informe que trabajemos de manera conjunta con el objetivo de incrementar la eficiencia en la implementación de REACH y éste es un paso para hacerlo. Como la ECHA está comprometida con la apertura y la transparencia, este trabajo se realizará en estrecha colaboración con los Estados miembros y otras organizaciones de partes interesadas acreditadas, que representan a ONGs, sindicatos, consumidores y el mundo académico”.

Las dos organizaciones también acordaron trabajar conjuntamente para resolver los desafíos científicos y técnicos, facilitando discusiones técnicas entre expertos y mejorando la transparencia en la calidad de los expedientes.