La industria europea de productos detergentes dispone actualmente tan solo de 6 sustancias activas biocidas conservantes (TP6) que puedan ser incluidas en sus productos, especialmente los detergentes líquidos, para protegerlos de la proliferación de bacterias o hongos y alargar así su vida útil. Una cifra que puede verse aún más reducida por la aplicación del Reglamento de Productos Biocidas (BPR).
Los detergentes y productos de limpieza cumplen un importante papel en el mantenimiento de la higiene, la protección de la salud o la conservación de instalaciones y equipos, siendo herramientas básicas para el sector de la limpieza profesional y también para el ámbito doméstico. Sin embargo, como productos químicos que son, no escapan a la estricta legislación europea, que, según AISE ( International Association for Soaps, Detergents and Maintenance Products), los está limitando peligrosamente.
El problema se encuentra principalmente en la legislación que afecta a los biocidas TP6, que son añadidos como conservantes en los productos de limpieza.
Los conservantes son ingredientes clave para la industria de los detergentes, que los agrega en cantidades muy pequeñas a los productos de limpieza a base de agua, para garantizar que en ellos no proliferen bacterias o moho. De este modo, los productos pueden permanecer conservados adecuadamente no solo durante su fabricación y transporte, sino que también se alarga su vida útil mientras que los productos se almacenan en tiendas o en el lugar donde serán utilizados.
Sólo 6 biocidas conservantes aptos
La disponibilidad de conservantes aptos para uso en detergentes está actualmente limitada a seis sustancias biocidas: MIT, BIT, CMIT/MIT, Bronopol ,Phenoxyethanol y OIT.
La mayor parte de los productos biocidas disponibles en el grupo TP6 (conservantes) no pueden utilizarse en la industria de los detergentes por diversas razones:
Uno de los aspectos que preocupan al sector es la futura disponibilidad de estos biocidas necesarios para conservar los detergentes líquidos a base de agua, que representan alrededor del 70% del mercado total doméstico y alrededor del 30% del sector de limpieza e higiene profesional.
La aplicación de los Reglamentos 528/2012 (uso y comercialización de biocidas) y 1272/2008 (clasificación, etiquetado y envasado de sustancias químicas) puede suponer la clasificación de estas sustancias como peligrosas, y provocar su prohibición en el ámbito de aplicación del Reglamento de Biocidas.
La reciente actualización de clasificación adoptada por las autoridades de la UE para dos de los conservantes más utilizados en el sector, MIT y CMIT/MIT, como sensibilizantes de la piel desafía el uso futuro a medio y largo plazo de estas sustancias específicas por parte de la industria. Este hecho impulsaria a la industria hacia la reformulación, asociada a altos costes de investigación y desarrollo, mientras que AISE considera que estos ingredientes pueden usarse con seguridad en productos de limpieza y detergentes.
Fuente: AISE